La Primera Dama de Estados Unidos, Melania Trump, retomó el lunes su campaña para combatir el acoso cibernético, mientras su esposo enciende las redes con insultos y arremetidas contra quienes considera sus opositores.
En un edificio del Departamento de Salud en las afueras de Washington, la primera dama instó a las compañías de tecnología a escuchar más las "ideas y preocupaciones de los niños" sobre el acoso en línea.
"Afrontémoslo: la mayoría de los niños son más conscientes de las ventajas y los inconvenientes de las redes sociales que algunos adultos", afirmó.
"En la sociedad global de hoy, las redes sociales son inevitablemente parte de la vida diaria de nuestros hijos. Esto se puede usar de muchas maneras positivas, pero también puede ser destructivo y dañino cuando se usa incorrectamente", agregó.
Desde que asumió el cargo, Melania Trump ha hablado con relativa poca frecuencia en público.
La esposa del presidente estadounidense ingresó en el hospital Walter Reed el 14 de mayo por lo que sus asistentes llamaron una afección renal "benigna", y fue dada de alta unos días después.
Su campaña de "ser mejor" (be best) se ha visto eclipsada en gran medida por los insultos diarios y la intimidación pública de su marido.
El lunes por la mañana, Trump tachó a los abogados y fiscales que investigan la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016 de "deshonra nacional".